"Mamá, pienso que te quiero dar un abrazo que dure para siempre.
Y cuando seas viejita, y si algún dia te "murís" te lo lleves con vos"
- Mr B (5 años)
Mostrando las entradas con la etiqueta la verdá de la milanesa. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta la verdá de la milanesa. Mostrar todas las entradas
lunes, 9 de noviembre de 2015
miércoles, 28 de julio de 2010
Una revelación
L'otro día estabamos con El Padre De La Criatura (EPDLC) en un conocido negocio que vende cosas para bebés, el aptly named "Bo Bébé", comprando cosas para la pieza del retoño, que aunque aún no ha nacido ya tiene una hermosa y recién pintada habitación, juguetes a rolete, más ropa que EPDLC y mejores muebles que el resto de la casa.
Compramos de todo, como buenos padres primerizos que creen que si su bebé no tiene esto o lo otro no va a poder sobrevivir el mes de existencia (recordemos que la gente tenía hijos en CAVERNAS... CAVERRRNAS, por Dios! y uno se preocupa a ver si le van a alcanzar los baberos... y si las medias de son antiderrapantes o el pobre bebito se va a resbalar en el piso de madera y desnucar en el acto.)
Cuando llegamos a casa y empezamos a sacar las cosas de las bolsas empezamos a ver que todo, absolutamente todo, TODO viene con advertencias ominosas del estilo
"Mire que si lo deja solo y sentadito en esta sillita, su bebito se va a cagar muriendo".
O "Si Ud. arma mal esta practicuna, su hijo va a morir una muerte horrible: aplastado y sofocado por su jirafa de peluche favorita".
La jirafa de peluche, por supuesto, tiene su propia advertencia "Si deja que su bebé juegue con el juguete sin supervisión, se lo va a terminar comiendo (la jirafa mide 50 cm), va a cagar bolas de peluche durante 6 meses, y después es altamente probable que además, se muera".
"Si deja esta bolsa al alcance del bebé, se va a morir de asfixia erótica, al mismo tiempo que descubre la masturbación - alla David Carradine".
Y ahi me di cuenta.
Ahi entendí todo.
Parece ser que durante los primeros años de vida, todos los bebés y los niños pequeños tienen una única misión: SUICIDARSE.
Aparentemente vienen al mundo para morir y la tarea de los padres es prevenir por todos los medios que esto ocurra. Es una lucha acérrima entre mini ser humano y padre ya socializado y desarrollado.
Por ejemplo:
• El bebé hace huelga de hambre, le ponemos una teta en la cara, chupe y coma, carajo. Para eso tiene el reflejo de succionar. De hambre usted no se me va a morir!
• El bebé quiere rodar de la cuna y caer al suelo para abrirse el cráneo de un tajo, y terminar con su existencia. Pero NOT ON MY WATCH, bebito. Te rodearemos de rejas y almohadones (sin asfixiarte, claro está).
• El bebito quiere morir embadurnado en su propia cacona. Le cambiaremos los pañales cada vez que se cague! JA!
• El bebito ya mas crecido quiere meter los dedos en el enchufe y electrocutarse de lo lindo. Le ponemos tapitas a los enchufes y andá a tratar de electrocutarte ahora, MBUAJAJAJAJAJJAAJ.
Alli estaremos para dificultarte la tarea!
Compramos de todo, como buenos padres primerizos que creen que si su bebé no tiene esto o lo otro no va a poder sobrevivir el mes de existencia (recordemos que la gente tenía hijos en CAVERNAS... CAVERRRNAS, por Dios! y uno se preocupa a ver si le van a alcanzar los baberos... y si las medias de son antiderrapantes o el pobre bebito se va a resbalar en el piso de madera y desnucar en el acto.)
Cuando llegamos a casa y empezamos a sacar las cosas de las bolsas empezamos a ver que todo, absolutamente todo, TODO viene con advertencias ominosas del estilo
"Mire que si lo deja solo y sentadito en esta sillita, su bebito se va a cagar muriendo".
O "Si Ud. arma mal esta practicuna, su hijo va a morir una muerte horrible: aplastado y sofocado por su jirafa de peluche favorita".
La jirafa de peluche, por supuesto, tiene su propia advertencia "Si deja que su bebé juegue con el juguete sin supervisión, se lo va a terminar comiendo (la jirafa mide 50 cm), va a cagar bolas de peluche durante 6 meses, y después es altamente probable que además, se muera".
"Si deja esta bolsa al alcance del bebé, se va a morir de asfixia erótica, al mismo tiempo que descubre la masturbación - alla David Carradine".
Y ahi me di cuenta.
Ahi entendí todo.
Parece ser que durante los primeros años de vida, todos los bebés y los niños pequeños tienen una única misión: SUICIDARSE.
Aparentemente vienen al mundo para morir y la tarea de los padres es prevenir por todos los medios que esto ocurra. Es una lucha acérrima entre mini ser humano y padre ya socializado y desarrollado.
Por ejemplo:
• El bebé hace huelga de hambre, le ponemos una teta en la cara, chupe y coma, carajo. Para eso tiene el reflejo de succionar. De hambre usted no se me va a morir!
• El bebé quiere rodar de la cuna y caer al suelo para abrirse el cráneo de un tajo, y terminar con su existencia. Pero NOT ON MY WATCH, bebito. Te rodearemos de rejas y almohadones (sin asfixiarte, claro está).
• El bebito quiere morir embadurnado en su propia cacona. Le cambiaremos los pañales cada vez que se cague! JA!
• El bebito ya mas crecido quiere meter los dedos en el enchufe y electrocutarse de lo lindo. Le ponemos tapitas a los enchufes y andá a tratar de electrocutarte ahora, MBUAJAJAJAJAJJAAJ.
Alli estaremos para dificultarte la tarea!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)